Servatur reforma cuatro complejos en Puerto Rico y negocia el alquiler de otros tres

La firma turística Servatur Hotels está en fase de reforma de tres complejos turísticos en Puerto Rico, los apartamentos Hartaguna, Carlota y el hotel Puerto Azul, y acaba de reabrir al público un cuarto establecimiento, el hotel Servatur Casablanca Suites & Spa, tras concluir los trabajos de modernización del edificio. En el proceso de adquisición y modernización de estos cuatro establecimientos la compañía ha invertido más de 100 millones de euros y se coloca ya con 21 activos en Canarias, la mayoría en Gran Canaria, que, con el aumento 142 habitaciones que incluye la reforma del Puerto Azul, representan 3.450 habitaciones y 7.406 camas en la islas. La aspiración de la empresa es llegar a las 10.000 habitaciones en los próximos años, según conforma el consejero delegado de la compañía, Kai Robert Mikaelsen. «Con paciencia; sabemos que queremos llegar a ese número de habitaciones pero no sabemos si a tres, cinco o siete años. No tenemos prisa, aunque siempre estamos tomando el pulso al mercado», expone Mikaelsen.

En medio de estas reformas, la empresa además está en pleno proceso de expansión y negocia el alquiler de otros tres complejos de apartamentos, cuyos nombres e inversión no revela, dos de ellos ubicados también en Puerto Rico y otro en la isla de Fuerteventura, lo que elevará la cifra de activos hasta los 24 edificios y sumará 381 habitaciones y 764 camas más, lo que hará entonces un nuevo total de 3831 habitaciones y 8170 camas. El empresario espera cerrar los acuerdos antes de la próxima temporada de invierno para luego acometer los trabajos de modernización de esos inmuebles. «Hay potencial para seguir creciendo y tenemos capacidad para abordar nuevos proyectos», afirma Mikaelsen, «la prioridad es Gran Canaria y luego Canarias».

Durante la pandemia, la compañía ha sumado cuatro nuevos complejos Servatur y otros cinco en gestión. En el primer caso se trata de la compra del hotel Servatur Casablanca Suites & Spa, de cuatro estrellas, que acaba de abrir al público tras los trabajos de renovación con una reforma parcial de las habitaciones y la incorporación de bañeras de hidromasaje en la mayoría de los balcones. Solo en el proceso de modernización parcial se ha invertido un millón de euros. Por otro lado ha comprado la totalidad de los apartamentos Carlota, anexos al Casablanca, cuya reforma integral, de 2,8 millones de euros eleva su categoría hasta las cuatro estrellas. Ahora será un producto enfocado solamente al público adulto y, aprovechando la cercanía, compartirá servicios como el restaurante a la carta, el gimnasio o el spa del Servatur Casablanca Suites & Spa. 

Puerto Azul, la joya

En Puerto Rico, Servatur también ha comprado 40 de los 61 apartamentos Hartaguna, lo que representa el 60% del total del edificio, mientras que los otros 21 los gestionará en régimen de alquiler. Tras la reforma integral ya iniciada, cuya inversión alcanza los tres millones de euros, pasará a la categoría tres estrellas y también estará dedicado al sector de solo adultos. 

Por último, la inversión más ambiciosa, de 42 millones de euros, la está realizando en la modernización del Puerto Azul, un complejo de cuatro estrellas que aumentará el número de las 351 a las 493 habitaciones con la construcción de un nuevo edificio anexo al principal. Las nuevas instalaciones contemplarán un spa exterior, la instalación de toboganes de ocho metros de altura, amplias zonas gastronómicas con cocina internacional, áreas deportivas y una parte de las estancias será destinada solo al público adulto. Servatur espera reabrir este hotel a finales de 2022.

A todas estas incorporaciones se suma el Servatur Don Miguel de Playa del Inglés que la cadena compró a Riu hace un año, pero atrás quedó la adquisición del hotel Beverly Park.«Había un acuerdo para comprar la deuda del hotel pero finalmente el vendedor se echó atrás y no había tiempo para solucionar por una cuestión de los plazos que marcó la justicia», señala Mikaelsen. 

Pese a la crisis económica derivada de la pandemia, Servatur no ha frenado su proceso de expansión, si bien ahora «somos más selectivos y hemos tenido que desistir de algunos proyectos», dice el empresario. No obstante considera que la compañía es «afortunada» porque ha cerrado la primera quincena de julio con un 93% de ocupación y esperan estar la segunda quincena y el mes de agosto sobre el 97%, aunque todavía queda por vender.

Dado el contexto internacional con una guerra, cancelaciones de vuelos, aeropuertos que piden a las aerolíneas limitar la venta de billetes y una espiral inflacionista, Mikaelsen destaca la fortaleza de Canarias. «Es cierto que nos cuesta trabajar al 100% y a los precios que queremos, pero estamos logrando buenas ocupaciones, hay una gran demanda de vacaciones en Europa», señala. Por eso no teme a una probable recesión económica tras el verano. «Afecta al poder adquisitivo de los clientes, pero la gente quiere viajar así que somos optimistas; no descarto ese escenario, pero también es verdad que lo que acabamos de pasar ha sido mucho peor». 

El empresario destaca la «buena relación» con las administraciones públicas a la hora de tramitar proyectos y licencias y los incentivos a la modernización turística, pero considera que sigue siendo necesaria una mayor colaboración público-privada para sacar adelante grandes inversiones con las que «ganamos todos» y pone como ejemplo el Siam Park. No cree, por otro lado, que el cambio climático y la futura desaparición de playas en las islas provoque una espantada del turismo, pues considera que Canarias ofrece más que playa. «Gran Canaria va a mantener su posición en el mercado porque es el mejor lugar de Europa y entre los mejores del mundo para invertir en turismo pues tiene buenas infraestructuras, es gastronomía, deporte, cultura y buena oferta de ocio», señala. 

En el año previo a la pandemia, Servatur Hotels registró un volumen de negocio de 50 millones de euros y para el ejercicio 2022-2023, cuando todos los complejos estén abiertos prevé alcanzar una facturación de 100 millones de euros.